Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.
Porque esto
es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos
los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.
Porque hay
un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo
en rescate por todos, de lo cual se dio
testimonio a su debido tiempo. 1 Tim 2:1-6
Los cristianos debemos ser un pueblo que ora. Nuestra
piedad y amor a Dios debe ir seguida
por nuestra buena conducta y amor por
todos los hombres, porque, ¿como? podríamos decir que somos piadosos y amamos
a Dios, si no, mantenemos una buena conducta y amamos a todos los hombres.
Han sido muchos años de indiscutible dolor en
Venezuela, nuestros gobernantes han perdido toda dignidad, la corrupción no
tiene impunidad, el hambre, el dolor y la miseria adornan nuestra querida
Venezuela. Pero ¿cómo debemos atacar esta situación los cristianos? ¿Qué nos
dice la biblia?, ¿Qué nos enseña Dios con todo esto?
Tratar de contestar estas preguntas, con mi
escaso conocimiento bíblico, seria una presunción, y sé, que en esto me pongo
claramente en evidencia, pero como siento y estoy convencido que he sido
llamado a predicar el evangelio y no solo yo, sino todos los que en cualquier
lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y Nuestro.
Pero en medio de tanta confusión ahi algo que veo
muy claro, y reprende mi corazón, una luz en un texto muy controversial para mi, y para muchos; es a saber: El versículo que dice: “el cual quiere que
todos los hombres sean salvos”. Hnos es fácil amar a un buen legislador: justo
y piadoso, o a un gobernador: que sea un buen gerente y honesto, si asi fuese; que
hacemos de más, pero Dios en su infinita misericordia nos ha puesto Gobernadores, que el mundo mismo odia, los cuales solo son alabados por los que están bajo
sus órdenes o son beneficiados por su corrupción, los cuales si se les quitara
el beneficio del cual gozan, de seguro también los odiarían.
Pero nosotros hnos, estamos llamados a sentimientos
más excelentes, ya que nosotros hemos nacido de nuevo, tenemos un nuevo corazón
y nuestra esperanza esta puesta en los cielos y no en cosas terrenales,
nosotros vemos a estos hombres vivir en abundancia, y lo único que debemos es sentir dolor por ellos, ya que perseveran en su maldad y no se arrepienten, es
mas estoy convencido que al desconocer a Dios y ser alabados por sus seguidores,
no saben el triste fin que les espera.
Hermanos apelo a su sabiduría dada por Dios, uds y yo, sabemos que en el pueblo de Dios un Rey debía leer la biblia y conocer los
mandamientos de Dios estos hombres que nos gobiernan ni siquiera un libro de
los 66 libros de la biblia han leído, ellos ignoran que Dios es Juez Justo y no
dara por inocente a tales culpables, a menos, que se arrepientan ya que Dios no
puede ser burlado. Pero Dios en su infinita misericordia quiere que estos
hombres sean salvos. Y tu y yo no podemos negar esta verdad del evangelio: ¡que
Dios quiere que todos los hombres sean salvos!
Los gobernantes, siempre han estado sujeto a las
tentaciones inherentes al cargo, por eso me imagino que Pablo, no pide, ni
suplica, sino que, exhorta a Timoteo que ore aun por los reyes, que en esos
tiempos no solo eran corruptos, sino que fueron los verdugos de muchos hermanos. Hoy
dia la situación es casi la misma y estoy convencido de que la voluntad de Dios, en todo, es nuestra santidad y que mejor manera de alcanzar la santidad sino orando.
Orando no solo por nuestros familiares amados,
sino que Dios confiado en la suministración de su don, nos ha puesto esta
prueba de orar; aun por los que nos ultrajan y nos persiguen; de los cuales debemos
decir: Padre perdónalos porque no saben lo que hacen.
Que gran bendición orar y salir a predicar el
evangelio en estos tiempos, que gran bendición es: no habernos dejado de congregar
en tiempos de pandemia, que gran bendición es: contar con hermanos como los de mi
iglesia y como mi Pastor, que no tuvieron miedo de adorar y servir al Señor en estos tiempos difíciles, dando al cesar lo que es del cesar y a Dios lo que es de Dios.
Hnos Jesucristo dijo “Toda
potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos
a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo; Mt: 28:18-20. El bien pudo haber dicho: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto tomen sus espadas y maten a todos mis enemigos que me crucificaron. Pero el no tuvo ningún pensamiento de venganza, odio o rencor, al contrario el mando a que se quedasen y predicasen EL EVANGELIO ahí mismo Jerusalén.
Nuestro Dios, es un Dios poderoso y yo orare al
Señor para que nuestros gobernantes se conviertan, porque debemos cuidar
nuestro corazón, miren que ya hemos sido enseñados que el pecado nos separa de
Dios, pero debemos saber también que el pecado nos separa de los hombre, asi
que hermanos prediquemos el evangelio a tiempo y fuera de tiempo, presentemos a
estos hombres delante de Dios y roguemos que Dios les envié un elocuente
mediador que les presente el camino a Jesucristo, el cual es nuestro Señor y
salvador a Él sea la gloria hoy, mañana y siempre. Amen.
